A pesar de las medidas recién decretadas por la Generalitat Valenciana y que estarán en vigor hasta el 31 de enero, el Ayuntamiento de Alicante ha querido endurecer dicha normativa ante la preocupante evolución de contagios por Covid en la ciudad y en la provincia. El consistorio alicantino ha ofrecido su máxima colaboración ante la campaña de vacunación y ha decretado el cierre de zonas de juegos y parques infantiles.