Xixona acomete obras en el Safareig para mejorar los accesos peatonales
La zona residencial del Safareig verá mejorados sus accesos a pie durante las próximas semanas. El Ayuntamiento de Xixona va a iniciar los trabajos de mejora de las escaleras que unen los dos aparcamientos ubicados en la calle principal, una obra muy reivindicada por los vecinos.
La edil María Teresa Carbonell ha explicado que “los escalones que se colocaron cuando se construyó la urbanización no tenían debajo una base de cemento y con el tiempo se han deteriorado hasta volverse impracticables, obligando a los vecinos a dar mucha más vuelta de la necesaria”.
Las obras, que consistirán en la renovación integral de las escaleras y los elementos de protección, se prolongarán durante aproximadamente dos meses y cuentan con un presupuesto cercano a los 34.000 euros.
Además, a poca distancia, se va a colocar hormigón en la travesía que une las escaleras de la calle Francesc Nicolau Mira Miralles y la plaza peatonal con bancos situada junto a la calle Safareig. Actualmente la superficie es de gravilla y con esta actuación se pretende hacerla más segura y accesible, dado que se trata de una vía que utilizan muchos vecinos para moverse entre esta urbanización y el centro del municipio.
El departamento de obras del Ayuntamiento también está llevando a cabo trabajos en diferentes muros que requieren de saneamiento y renovación. Es el caso de uno de los más céntricos y grandes del municipio, el que separa el barrio María Verdú y la calle Terradets. La brigada municipal ya está actuando en él y, cuando los trabajos finalicen, tendrá una estética similar a la de otros muros del mismo barrio, para darle continuidad.
La concejal María Teresa Carbonell ha explicado que “el mantenimiento y rehabilitación de muros es algo que se hace con cierta frecuencia, porque hay muchos por todo el pueblo y buena parte de ellos son muy antiguos”. “Son obras que pueden pasar desapercibidas pero que son importantes para la seguridad y estética de nuestro municipio”, ha dicho. Uno de los muros cuya rehabilitación finalizará en breve es el de las calles Sant Antoni y Nou, donde se ha hecho especial hincapié en evitar humedades
