Dos especialistas del MARQ viajan a China para preparar el viaje de los Guerreros de Xi’an
El MARQ comienza la cuenta atrás para inaugurar la próxima muestra internacional sobre los Guerreros de Xi’an. Dos especialistas del Museose han desplazado hasta China para ultimar los preparativos de esta nueva apuesta cultural de la Diputación que podrá visitarse en Alicante desde finales de marzo hasta enero de 2024.
La arqueóloga y técnica de Exposiciones de la Fundación MARQ, Teresa Ximénez de Embún, y la restauradora, Silvia Roca, se encuentran estos días en el país asiático colaborando con sus homólogos de Xi’an y Shaanxi en los trabajos preparatorios de chequeo, embalaje y traslado de las piezas, que han sido cuidadosamente seleccionadas por los nueve museos de la República Popular China para la exposición “El Legado de las dinastías Qin y Han. China”.
Para la vicepresidenta de la Diputación de Alicante y diputada de Cultura, Julia Parra, “esta próxima exposición es un hito de primera magnitud que sitúa nuestra provincia entre los destinos de mayor interés cultural a nivel internacional”.
La responsable provincial ha destacado “que es una oportunidad única poder ver en Alicante durante diez meses una selección que incluye más de un centenar de objetos muy significativos, entre los que se incluye nueve guerreros de terracota y un caballo, el número máximo que permitido por las autoridades chinas”.
La diputada ha indicado que los trabajos de las dos técnicas en China consistirán en “realizar la supervisión de piezas, el protocolo de manipulación, embalaje y cuidados necesarios para trasladar las 120 piezas originales y cinco réplicas que constituyen la exposición internacional”-
Por su parte, Teresa Ximénez de Embún ha manifestado que “es un auténtico privilegio que una colección de primera línea como los Guerreros de Xi’an venga al MARQ, lo que pone de manifiesto que desde nuestra Fundación CV MARQ y el Museo hemos sido capaces de superar todos los requisitos que el Gobierno de China ha marcado para desplazar hasta Alicante este legado de su historia, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1987”.
En esta misma línea se ha manifestado Silvia Roca, quien ha explicado que “es fundamental el trabajo de certificación del estado de conservación de cada pieza para que regresen en el mismo estado que se ha producido su préstamo a los museos de origen garantizando un tratamiento óptimo durante el embalaje, montaje y exhibición”.
Actualmente los técnicos de los nueve museos chinos participantes en la muestra se encuentran en las tareas de concentración de piezas y fabricación de los embalajes, unas cajas a medida que se cierran y sellan con un precinto de seguridad numerado que será abierto en el MARQ una vez transcurrida la correspondiente aclimatación, de conformidad con los protocolos internacionales.
Para ello es imprescindible el control de temperatura, humedad e iluminación, así como la no contaminación de las piezas, que serán trasladadas en cajas de madera forradas de aluminio y materiales aislantes. También se contará con sistemas especiales antivibración, sensores de impacto y materiales especiales que eviten la abrasión por fricción.