CD AGUSTINOS | De templo en templo
No solo en Alicante el balonmano es terreno de reconquista. También en Ciudad Real, localidad que visitará este fin de semana el CD Agustinos, disfrutaron de las más altas cotas en este deporte. Años de historia, títulos, nombres de leyenda, alumbraron un Quijote Arena que hoy ve como la reconstrucción del club de su ciudad va por buen camino, como en Alicante, donde el conjunto tricolor ha tomado el relevo de los Calpisa, Tecnisán o Costablanca.
Allí, el Balonmano Alarcos Ciudad Real es continuador del deporte en la localidad manchega, tras la marcha de su icónico club de la ciudad del Campo de Calatrava. Tras falta de apoyo de afición, instituciones y empresas, el mítico Ciudad Real sería trasladado a la capital de España como una sección del Atlético de Madrid, muriendo poco después. Años de trabajo han llevado a que el Alarcos finalmente alcance la División de Honor Plata, tras ser fundado en 2012.
Morir de éxito contempla una resurrección cual ave fénix. Alicante conoce bien ambos ejemplos de este tipo, y si bien el conjunto manchego disfrutó de los Hombrados, Entrerríos o Duishebáyev, la capital de la comarca de l'Alacantí pudo gozar también con los Rochel, De Miguel, Labaca o Cascallana. Ahora toca empezar desde abajo, y tanto en Ciudad Real como en Alicante la receta tiene un ingrediente clave: la cantera.
Así se encontrarán dos equipos, con una pesada carga histórica sobre sus hombros, con una afición hambrienta de repetir éxitos pasados, y con un arranque de liga distinto. Agustinos de Alicante logró la victoria por la mínima ante Bordils, en el primer partido oficial de los tricolor en el Pitiu Rochel, mientras que Alarcos caería ante Nava en el inicio liguero. El sábado a las 19:00 se darán cita dos plazas tradicionales, que pelean en la reconqusita del balonmano.
