Barcala alerta de los riesgos de la crisis diplomática con Argelia para Alicante
El alcalde de Alicante, Luis Barcala, ha expresado este lunes su “gran preocupación” por los efectos que pueda tener sobre la ciudad y el conjunto de la provincia “la crisis diplomática, comercial y de cooperación con Argelia generada por el Gobierno, a raíz de su inesperado giro sobre el Sáhara".
Antes de participar en la inauguración en Casa Mediterráneo del ‘Foro de Integración en Tiempos de Crisis’, el primer edil ha recalcado su “inquietud” por la repercusión que pueda tener este nuevo escenario “de inestabilidad” entre la mayor colonia de extranjeros residentes en Alicante.
Barcala ha recordado que casi 8.500 argelinos están censados en la capital de la provincia, una cifra que supera ampliamente a la de otros países europeos y latinoamericanos. También ha cifrado en unos 20 millones de euros anuales el volumen de negocio que genera en la ciudad la comunidad argelina, que es la principal inversora en el mercado inmobiliario de Alicante.
“Además del impacto que esta nueva situación política con Argelia pueda tener en el precio del gas”, ha indicado el alcalde, “el volumen de negocio de la ciudad de Alicante con Argelia, más en exportaciones que en importaciones, ronda los 20 millones de euros al año, lo cual causa un impacto directo sobre nuestro municipio”, ha explicado Barcala. “Emplazo al Ejecutivo de Sánchez a reconducir una situación de inestabilidad que ellos mismos han creado con una decisión diplomática inexplicada e inexplicable”, ha apostillado.
SOLUCIONES
En cuanto al ‘Foro de Integración en Tiempos de Crisis’, Barcala ha animado a los participantes a “aportar soluciones regionales desde la región mediterránea a los problemas globales que plantea la concatenación de crisis de alcance mundial, al tiempo que ha recordado la condición de la ciudad de Alicante como “enclave privilegiado” para fomentar el diálogo y el encuentro en la cuenca Mediterránea.
“Históricamente, somos una tierra de recepción y encuentro entre distintas culturas y tradiciones”, ha señalado, “y contamos con una profunda vocación comercial para seguir propiciando el intercambio, la conciliación, el desarrollo y el crecimiento sostenible entre todos los países del Mediterráneo”.