Alicante impulsa la mejora de la movilidad en la Rambla y el Paseíto Ramiro
La Concejalía de Urbanismo ha impulsado, para su aprobación en Junta de Gobierno, el proyecto de mejora de la movilidad urbana en el ámbito comercial y turístico en el Centro Histórico de Alicante, que abarca las calles comprendidas entre la Rambla de Méndez Núñez de Alicante y el Paseíto Ramiro, a excepción de la calle San Fernando, que se mantiene sin cambiar y cuyo presupuesto asciende a 2.631.086 €
El proyecto trata de cambiar la supremacía del vehículo sobre el peatón en prácticamente todo el espacio, en el que las aceras quedan reducidas a bandas laterales que no cumplen los actuales cánones de accesibilidad y en la que las zonas de reserva para carga y descarga y las islas de contenedores para residuos urbanos ocupan otra parte importante, además de reducir el atractivo al paisaje urbano que la compone.
Las actuaciones pasan por impulsar, en una primera fase, la peatonalización exclusiva de la calle Jorge Juan hasta el Paseíto Ramiro, mientras que el tramo de la calle Altamira seguirá abierto al tráfico, por el momento, con una plataforma única que sea compatible con la situación actual.
En la actualidad, de las calles objeto de la intervención, ya son peatonales la calle Callizo del Marqués, Niágara, y el tramo de lado mar de la calle Bendicho, estando el resto configuradas con aceras laterales y calzada central, puntualmente con banda de estacionamiento reservado. El acceso al tráfico rodado está permitido en todo el ámbito de actuación, pudiendo circular en todas ellas
Atendiendo a todos los objetivos y premisas de partida, se proyecta una solución que renueve un espacio actualmente de hegemonía vehicular, por otro donde se priorice singularmente al peatón, sin la eliminación total del primero.
Cabe destacar que para el diseño se ha pretendido favorecer la estancialidad, seguridad, movilidad y la accesibilidad, transformando todos los viales en espacios más humanos, más enfocados hacia el peatón y menos hacia el tráfico rodado. En definitiva, se ha buscado una humanización del conjunto para que pueda ser vivido a día.
Como solución final, no se opta por una peatonalización integral del espacio, en especial por la dificultad a nivel de tráfico que supondría no permitir el paso del autobús urbano por el eje San Telmo-Altamira, a través del cual accede a la Rambla y el centro de la ciudad.
A pesar de ello, se alcanza los objetivos principales de mejora de la movilidad y accesibilidad peatonal y se invierte el actual dominio del espacio urbano por el tráfico a favor del peatón. Dichos objetivos se alcanzan mediante la generación de una plataforma única, el aumento del ancho útil de las aceras y la restricción al tráfico de un buen número de calles del ámbito.
TRÁFICO
Dado que el presente proyecto no pretende la peatonalización del eje de la calle Altamira ni de la Rambla, sino una mejora de la movilidad y accesibilidad peatonal en el entorno del centro histórico mediante la conversión del espacio a plataforma compartida y ampliación de las aceras, se considera conveniente proseguir con el procedimiento necesario para su aprobación.
En el caso de que se llevase a cabo el mencionado estudio por parte del Servicio de Tráfico, Transportes, Movilidad Sostenible y Accesibilidad, y cuyas conclusiones fueran la peatonalización completa de este entorno, se considera que el proyecto es perfectamente compatible con la citada solución.