Una más de copas
Año atípico para el Hércules de Alicante. Los de Siviero quedaron exentos de la primera ronda de la Copa del Rey, entrando en la competición del KO directamente en su segundo capítulo. El torneo copero fue el único bálsamo para la afición alicantina, que guarda en la retina la pasada temporada como su particular annus horribilis, con el sinsabor de no competir en la postemporada por el ascenso a Segunda División.
Aquel regreso al Camp Nou, el gol casi sin querer de Mainz en el Rico Pérez, y la efímera atención mediática a nivel nacional, hicieron reverdecer viejos laureles de días grandes para el fútbol alicantino. Pero, claro está, para llegar a disfrutar de los focos, toca batirse el cobre en una competición tan dura como extensa en el calendario. Sin parada previa, el Hércules se mide al Lorca Deportiva mañana miércoles a las 21h en el Rico Pérez. Un partido entre dos jornadas, más kilómetros para los jugadores, pero con la misma obligación de competir que en Liga, ya que el club considera crucial el éxito en Copa.
Siviero ha anunciado cambios para el encuentro. El argentino podría dar entrada a Buigues en portería, dando minutos en la defensa a jugadores como Adrià Vilanova o Connor. Peña y Bueso son baja, lo cual obligará a Samuel o Santamaría a repetir desde el inicio. En el centro del campo, Checa y Miñano podrían partir de inicio, contando con reservas para la mediapunta como pueden ser Gaspar y Nieto. Óscar Díaz es la alternativa a Carlos en la demarcación de ariete, pero no está clara su participación.
El Lorca, recién ascendido desde la Tercera División, llega como colista del grupo cuarto de la Segunda División B. Esa suerte de refundaciones que impera en la localidad murciana ha querido que, para esta temporada, los lorquinos cuenten con un equipo en Segunda y otro en la categoría de bronce, con amagos de fusión, y con el horizonte plagado de dudas, cosa tradicional en el futuro del balompié en esta localidad.
Con todo ello llega la Copa a Alicante. Lejos queda la eliminatoria ante el Barça el pasado año. Ahora toca volver a pelear por hacer rentable una competición que fuerza el físico de los jugadores, pero que es un bálsamo para las escuálidas cuentas de un club, que busca el centenario con más problemas que alegrías.
